La pandemia que está atacando a todo nuestro planeta durante el inicio de este 2020 debería enseñar a la industria alimenticia a fabricar alimentos o productos más saludables. ¿Por qué hacemos esta afirmación?, porque según un grupo de expertos del NHS en Reino Unido han revelado que un 76 % de los pacientes que son críticos con coronavirus tienen un problema de sobrepeso u obesidad.
Según este informe recogido de 196 pacientes ingresados en la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) con COVID-19 con una media de edad de 65 años (de estos 57 eran mujeres y 139, hombres), indicó que más de la mitad de los pacientes tenían un IMC (Índice de Masa Corporal) superior a 25, es decir, sobrepeso u obesidad.
Pero, ¿hay algún vínculo entre la obesidad y la COVID-19? Según informa la OMS (Organización Mundial de la Salud), la COVID-19 causa o puede causar síntomas y complicaciones más graves en personas con sobrepeso u obesidad.
Existe un consenso entre los expertos de que tanto los pacientes con enfermedades de arterias coronarias como pacientes con IC (Insuficiencia Cardíaca), tienen un riesgo mucho mayor a padecer infecciones respiratorias virales, unidos a otros factores relacionados con el sobrepeso y obesidad (diabetes, hipertensión, EPOC o Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica, etc.). Muchos expertos habían advertido acerca de que “nuestra alimentación” nos estaba matando. Como comenté anteriormente, las estadísticas han demostrado que casi 2 de cada 3 pacientes con COVID-19 gravemente enfermos tienen sobrepeso u obesidad.