El balance o recuento calórico es la diferencia entre las calorías de lo que comemos y la energía que gastamos, según la teoría clásica, si bajamos las calorías bajaremos de peso. Pero nuestro organismo es más complejo que eso: en el proceso digestivo y ante la presencia de glucosa, el organismo libera insulina, que es la que impide que bajes de peso haciendo uso de las reservas de grasa.
Las dietas hipocalóricas a menudo provocan un aumento de insulina, por lo que se pierde peso en agua y músculo pero no tanto en grasa, lo que producirá un efecto rebote a corto plazo.
La dieta debe estar equilibrada en hidratos de carbono, proteínas y grasas para que también haya un equilibrio hormonal, de esta forma el organismo conseguirá mantenerse.